Una insólita dieta que se ha puesto de moda entre las novias estadounidenses, causa alarma en el país anglosajón por los efectos nocivos que pudiera tener.
Se trata de un método, llamado K-E Diet, y que primero se hizo popular en Europa para luego llegar a tierras norteamericanas de la mano del doctor Oliver Di Pietro, quien implementó el tratamiento en su clínica de Bay Harbor Islands, en Florida.
Consiste en alimentarse a través de un tubo insertado en la nariz y que llega directamente al estómago, controlando estrictamente las calorías que se ingieren que no pueden superar las 800 diarias.
El régimen, que promete hacer perder el 10% del peso en 10 o 12 días, se basa en una solución de aminoácidos, vitaminas y minerales, además de un sistema que quema las grasas, conocido como ketosis.
Por otro lado, este sistema no sólo es peligroso para la salud, también es caro. Tiene un valor de 1.500 dólares, además de correr el riesgo de desarrollar cálculos renales, sufrir deshidratación, dolores de cabeza, mal aliento y estreñimiento, entre otras cosas.
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